Os voy a contar la historia de una boda, la preparación de la boda de mi prima.
Para entrar en contexto mi marido y yo como responsables de la empresa Niralis que se dedica a fabricar productos de madera ya que tenemos maquinaria de carpintería decidimos ayudar a mi prima Soraya en la decoración de su boda.
Tanto ella como su novio Alex estaban muy emocionados con la idea de hacer un montón de cositas especiales en su boda y les invitamos a que vinieran a nuestro taller.
Todo empezó porque anteriormente les mostramos los Rituales de la arena que hacíamos para las bodas y les dije que les queríamos regalar uno personalizado en los que ellos elegían el color del material y el color de las arenas así que les animamos a venir a nuestro taller y en ese momento empezó la locura porque a todos nos vinieron la lluvia de ideas de cosas que podíamos hacer para la boda.
La visita a nuestro taller
En primer lugar, les enseñamos las cosas que fabricábamos y les aportamos ideas. En este caso Soraya al igual que yo somos unas locas de las cositas personalizadas y según íbamos hablando las dos se nos iban ocurriendo más y más cosas que poder hacer para los invitados y la decoración.
Empezamos con la idea de hacer un cartelito para Candy Bar y seguimos añadiendo también Glitter Bar, ¡Ostras¡ y el Libro de firmas también y… bueno podemos poner el Corner de quesos, Jamón ibérico, etc y el caso es que así hicimos como unos 10 cartelitos.



Después se nos ocurrió con las tablas de nuestros marcos de fotos para grabar que podíamos grabar unos mensajes para las niñas de las Arras que seguramente quedara genial porque además tienen el tamaño perfecto para sus manitas.
nos vino la inspiración
La verdad es que nos reímos bastante hasta que elegimos el mensaje que finalmente grabamos.
Y cuando vimos el resultado de cómo quedó grabado el cartel, se le ocurrió a Alex poner otro cartel de ese tamaño en el Candy Bar una foto de Gandalf de la peli del Señor de los anillos pero con un mensaje que dijera «Comed Insensatos». El resultado fue genial y nos encantó a todos y sorprendió increíblemente a los invitados. (Hasta uno de ellos se lo llevo a su casa).
Y como no, a mi prima se le ocurrió que ya que estábamos necesitaría el cartel de Bienvenida a su boda y mi marido, que es un artista, se puso a diseñar y a hacer en dos tipos de madera diferente el cartel de bienvenida a la boda que quedó super bonito y acabaron encantados. Era una madera de fondo blanca y las letras pegadas encima en color roble.

Con deciros que la madera inversa de las letras la utilizamos también para la entrada al salón. ¡Es que era tan bonito!
Hasta ahí ya lo conté, en otro post del blog donde indico que podemos hacer cartelería personalizada para las bodas.
Esta historia de una boda es completamente real y nos pasó el año pasado. Prometo que no me lo estoy inventando.
Nos llegó la lluvia de ideas
Con todo esto de lo que hablamos, no se acabó en un día de trabajo sino que fueron varios días dedicándonos a ello y se nos fueron ocurriendo algunas cosas mas donde meter cartelería para bodas.


Estábamos entusiasmados porque luego nosotros también lo íbamos a disfrutar en su boda y a la vez nos iba a servir de publicidad que esas cosas siempre vienen bien y así presentas tu trabajo a los invitados.
Y era algo que seguro que encantaba porque la mitad eran familia y ya sabéis que casi siempre suelen ser muy cumplidos, no te van a decir si no les gusta. Al contrario te van a decir que todo es genial y precioso pero en este caso es que era así.
En la historia de una boda como está yo sabia perfectamente como iban a ser las reacciones de los invitados.
Cuando ya teníamos preparada toda la cartelería, las tablas para las niñas de las arras, el cartel del Candy Bar con Gandalf y el cartel de Bienvenida a la boda se nos ocurrió hacer unos marcos de fotos con un texto personalizado para los hermanos de los novios y los padres que emocionó mucho.


Y mas ocurrencias…
Y después de esto Soraya se acordó de que podía hacer otro especial para su abuela y a este le añadimos un ramillete de flores de lavanda que le encantan a la mujer. Este fue un precioso momento que nos emocionó a todos.

Todo estaba quedando genial y cada cosa que preparábamos nos gustaba más.
Ellos tenían un montón de ideas y yo estaba como loca diseñando que me salían los diseños en pocos minutos y muy emocionada por ver los resultados.
Y entonces, fue cuando se les ocurrió tener un pequeño detalle con otras parejas amigos de los novios. Cogimos unos círculos pequeños de madera y los grabamos con el texto «Laura y Dani ¿os animáis?» y llevaba un corazón pegado y dos anillos entrelazados preguntando evidentemente que si se animaban a casarse.
De esos no encuentro foto asi que no puedo mostraroslo.
En fin, que lo que iba a ser el detalle para algunas parejas al final se convirtió en detalles de círculos grabados para media boda porque tienen un montón de amigos y ¡mi prima es que quería casar a todo mundo!.
Nuestra sorpresa personalizada para los novios
Acabábamos de terminar con todos los detalles que ellos querían y ya pensamos que todo se había acabado porque además se estaba acercando ya la fecha del evento.
Entonces, fue cuando un día trabajando se nos ocurrió a nosotros la idea de hacer algo especial para ellos también como regalo y Nico (mi marido) había visto algunas ideas para entregar el dinero en la boda y nos pusimos a trabajar con el diseño del sobre de madera.
Estuvimos probando diferentes formatos y como mejorar el producto hasta que conseguimos dejarlo como queríamos.
La historia de una boda no hubiera sido lo mismo si profesionales como nosotros no preparamos sorpresa final para los novios.
¡Y por fin llegó el gran día!
Alex estaba guapísimo y algo nervioso y mi prima estaba preciosa, ¡mi pequeña muñeca se casaba!, la finca era una preciosidad y todo estaba tan bonito…
Nada más entrar podíamos ver nuestro cartel de bienvenida a la boda y nosotros, claro, tirándonos fotos con toda la cartelería que habíamos hecho. Y yo contando a mis primos y tíos que eso lo habíamos hecho nosotros y preguntando qué les parecía el resultado y, como os decía antes, todo el mundo diciendo que era chulísimo.
Primero llegaron los pajes con su cartel que decía ¡Todos tranquilos, el novio no ha huido! y luego llegaron las niñas de las arras, delante de la novia con su cartel diciendo «Una novia nunca llega tarde ni pronto, llega exactamente cuando se lo propone», me emocioné de verdad, y los invitados estaban emocionados por ese momento en el que llegaba la novia y riendo por el mensaje del cartel que llevaba la niña.


Momento ceremonia de la arena
La ceremonia era muy emotiva y entonces llego el momento de hacer el ritual de la arena, el cual habíamos personalizado también, tanto el marco de fotos con los nombres y la fecha como el texto de la lectura que lo hicimos acordando con unos amigos de los novios.
Empezaron a verter la arena de colores y una amiga de los novios leyó el pergamino y las palabras emocionaron mucho a Soraya y Alex y cuando terminaron de verter la arena, por romper un poco la emoción del momento, Alex se giró hacia mí y me preguntó si lo habían hecho bien y entonces todos los invitados se giraron hacia mí y les dije que estaba muy bien y todos empezamos a reir. Fue una anécdota que salía de manera natural al novio y nos gustó mucho.
La boda transcurrió como tenía que ser, divirtiéndonos, bailando, emocionándonos y todo genial salvo que por unos minutos se perdió mi hija de 6 años jugando. Pero eso no lo voy a contar ahora, y el caso es que apareció con otro niño debajo de una mesa porque estaban jugando al escondite. Por supuesto ganaron la partida.
Pues después de una tarde maravillosa llegó el momento de la entrega del sobre con el dinero, la cara de mi prima lo dijo todo cuando lo vio. ¡Qué emoción!
El regalo del sobre le encantó y sus palabras fueron «Chicos sois los mejores» y nos abrazamos emocionados sabiendo que habíamos disfrutado de todo, pero también sabiendo que ya se había terminado. Ambas empezamos a llorar de la emoción, aunque igual las cervezas o las copas que habíamos consumido durante la boda colaboraron en algo en este momento tan bonito y exaltaron la emoción, pero el caso es que fue precioso.
La historia de una boda terminaba
¡Por fin mi niña se había casado! y con un chico estupendo que la quiere y cuida de ella. ¿Qué mas se puede pedir?.
Solo queremos que sean muy felices y nos traigan primitos pronto que es lo típico que se dice pero también es lo que les deseamos realmente.
Al rato todo acabó y ¡había salido genial! Nos subimos por fin al coche de vuelta a casa, yo estaba cansada con dolor de pies, los ojos rojos y el pelo ya estaba de aquella manera y mis ojos se cerraron y me quedé dormida en el coche.
Y aquí acabó mi historia de una boda.